Поиск по творчеству и критике
Cлово "OTRA"


А Б В Г Д Е Ж З И Й К Л М Н О П Р С Т У Ф Х Ц Ч Ш Щ Э Ю Я
0-9 A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z
Поиск  
1. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo IX
Входимость: 17. Размер: 67кб.
2. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo VIII
Входимость: 15. Размер: 68кб.
3. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo III
Входимость: 14. Размер: 58кб.
4. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capitulo VI
Входимость: 13. Размер: 49кб.
5. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo II
Входимость: 12. Размер: 56кб.
6. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo IX
Входимость: 12. Размер: 54кб.
7. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Tercera parte. Capitulo V
Входимость: 12. Размер: 56кб.
8. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo V
Входимость: 11. Размер: 59кб.
9. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Segunda parte. Capítulo III
Входимость: 11. Размер: 39кб.
10. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capitulo XI
Входимость: 11. Размер: 52кб.
11. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo X
Входимость: 11. Размер: 51кб.
12. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Quinta parte. Capitulo IV
Входимость: 11. Размер: 47кб.
13. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo II
Входимость: 10. Размер: 44кб.
14. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Tercera parte. Libro VIII. Mitia. Capitulo VII. El de antaño
Входимость: 10. Размер: 40кб.
15. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo XII
Входимость: 10. Размер: 45кб.
16. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo IV
Входимость: 10. Размер: 50кб.
17. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Primera parte. Capitulo III
Входимость: 9. Размер: 37кб.
18. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capitulo VII
Входимость: 9. Размер: 41кб.
19. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток)
Входимость: 9. Размер: 51кб.
20. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo VI
Входимость: 9. Размер: 70кб.
21. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Primera parte. Capitulo IV
Входимость: 9. Размер: 36кб.
22. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo III
Входимость: 9. Размер: 60кб.
23. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Sexta parte. Capitulo VIII
Входимость: 9. Размер: 30кб.
24. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Segunda parte. Capítulo VII
Входимость: 9. Размер: 53кб.
25. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo VII
Входимость: 8. Размер: 43кб.
26. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Sexta parte. Capitulo I
Входимость: 8. Размер: 28кб.
27. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo primero
Входимость: 8. Размер: 44кб.
28. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo III
Входимость: 8. Размер: 45кб.
29. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo V
Входимость: 8. Размер: 61кб.
30. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo IV
Входимость: 8. Размер: 63кб.
31. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Sexta parte. Capitulo III
Входимость: 8. Размер: 26кб.
32. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Quinta parte. Capitulo I
Входимость: 8. Размер: 49кб.
33. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Tercera parte. Libro VIII. Mitia. Capítulo V. Una resolución repentina
Входимость: 8. Размер: 38кб.
34. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo XIII
Входимость: 8. Размер: 38кб.
35. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo VI
Входимость: 8. Размер: 42кб.
36. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Cuarta parte. Capítulo I
Входимость: 8. Размер: 36кб.
37. Dostoevsky. El jugador (Spanish. Игрок). Capitulo 10
Входимость: 7. Размер: 32кб.
38. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Segunda parte. Capítulo VI
Входимость: 7. Размер: 59кб.
39. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Tercera parte. Capitulo III
Входимость: 7. Размер: 37кб.
40. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Segunda parte. Libro V. Pro y contra. Capitulo V. "El gran inquisidor"
Входимость: 7. Размер: 55кб.
41. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo VII
Входимость: 7. Размер: 56кб.
42. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание)
Входимость: 7. Размер: 23кб.
43. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Cuarta parte. Capitulo II
Входимость: 7. Размер: 34кб.
44. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo V
Входимость: 7. Размер: 52кб.
45. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo VIII
Входимость: 7. Размер: 58кб.
46. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Primera parte. Libro II. Una reunión fuera de lugar. Capitulo V. Así sea!
Входимость: 7. Размер: 24кб.
47. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo IV
Входимость: 7. Размер: 36кб.
48. Dostoevsky. El jugador (Spanish. Игрок). Capítulo 8
Входимость: 7. Размер: 21кб.
49. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo X
Входимость: 7. Размер: 57кб.
50. Dostoevsky. El jugador (Spanish. Игрок). Capítulo 2
Входимость: 6. Размер: 15кб.

Примерный текст на первых найденных страницах

1. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo IX
Входимость: 17. Размер: 67кб.
Часть текста: a tal mujer, porque yo no tomaba en cuenta a Tatiana Pavlovna. Quizá no está permitido decirle a la cara a una mujer de semejante categoría: " Me cisco en sus intrigas!" , pero yo lo había dicho y por eso estaba contento. Sin hablar de lo demás, estaba seguro al menos de que, por haber adoptado aquel tono, yo había borrado todo lo que había de ridículo en mi posición. Pero no tuve tiempo de pensar largamente en todo aquello: mi cerebro estaba ocupado por Kraft. No es que me atormentase mucho, pero a pesar de todo yo estaba conmovido hasta el fondo del alma; y hasta el punto de que el sentimiento ordinario de placer que experimentan los hombres en presencia de la desgracia del prójimo, por ejemplo cuando alguien se rompe una pierna, pierde el honor, se ve privado de un ser querido, etc., aquel mismo sentimiento ordinario de innoble satisfacción cedía en mí enteramente a otro sentimiento, a una sensación extremadamente imperiosa, a la pena, al dolor... si es que aquello era el dolor, lo ignoro... en todo caso a un sentimiento extremadamente poderoso y bueno. Y por aquello también estaba yo contento. Es asombrosa la multitud de ideas extrañas que pueden atravesarle a uno el espíritu precisamente cuando se está sacudido por alguna noticia colosal que debería, parece, ahogar los demás sentimientos y dispersar todas las ideas extrañas, sobre todo las ideas sin importancia; ahora bien, son éstas, por el contrario, las que se presentan. Me acuerdo de eso todavía; me vi cogido poco a poco por un temblor nervioso...
2. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo VIII
Входимость: 15. Размер: 68кб.
Часть текста: una multitud de vacilaciones a incertidumbres en los puntos más importantes; por eso me había pasado casi toda la noche en un estado de duermevela, casi de delirio, había tenido muchísimos sueños y, por así decirlo, ni una sola vez había dormido como Dios manda. A pesar de eso, me levanté pimpante y dispuesto como nunca. Sobre todo no quería encontrarme con mi madre. Con ella no podía hablar más que de un solo tema y temía dejarme apartar de mis propósitos por alguna impresión nueva a imprevista. La mañana era fría, y sobre toda la naturaleza flotaba una bruma húmeda y lechosa. No sé por qué, pero las mañanitas atareadas de Petersburgo, a pesar de su feo aspecto, me agradan siempre y toda esa multitud egoísta y perpetuamente preocupada apresurándose a ir a sus asuntos tiene para mí, a las siete de la rnañana, algo muy seductor. Me gusta sobre todo, yendo de camino, a toda prisa, pedir un dato, o mejor todavía si alguien me pregunta! pregunta y respuesta son siempre...
3. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo III
Входимость: 14. Размер: 58кб.
Часть текста: habría yo tolerado aquella mirada y aquella sonrisa insolente sin una protesta inmediata, por tonta que fuera, poco importa, de mi parte? Y notadlo, había llegado justamente con la idea de ofenderme lo antes posible, antes de haberme visto: yo era a sus ojos "el comisionado de Versilov", y estaba persuadida ya en aquel momento, y lo ha seguido estando mucho tiempo después, de que Versilov tenía entre sus manos todo el destino de ella y tenía el medio de perderla en el momento mismo, si quisiera, gracias a un determinado documento; por lo menos ella lo sospechaba. Era un duelo a muerte. Pues bien, sin embargo yo no estaba ofendido. Había ofensa, pero yo no la sentía. Qué digo?, estaba incluso contento; venido para odiar, sentía incluso que empezaba a amarla. "Me pregunto si la araña puede odiar a la mosca a la que acecha y a la que atrapa. Querida mosca! Me parece que uno quiere a su víctima; por lo menos se la puede amar. De esta manera yo, por lo que a mí se refiere, amo a mi enemiga: estoy terriblemente...
4. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capitulo VI
Входимость: 13. Размер: 49кб.
Часть текста: en fingir delante de mí; si, por to menos, disimulases que quieres hacerme beber... -Estás diciendo tonterías y estás borracho. Es preciso seguir bebiendo, y te sentirás más alegre. Vamos, coge tu cops, cógela. -Cómo es eso de "cógela"? Voy a irme, eso es todo. Y en efecto, iba a levantarme. Le entró una gran cólera. -Es Trichatov quien te ha contado historias contra mí: os he visto, murmurabais juntos. Pues bien, no eres más que un imbécil. A Alphonsine se le revuelve el estómago cuando él se le acerca... -Es repugnante. Ya te contaré lo que vale. -Ya me lo has dicho. A cada momento tienes en la boca a Alphonsine. Eres terriblemente estrecho. -Estrecho? - No comprendía -. Ahora se han puesto de acuerdo con el picado de viruelas. Por eso los he despedido. Son indecentes. Ese picado de viruelas es un canalla, va a pervertirlos. Yo, por el contrario,...
5. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo II
Входимость: 12. Размер: 56кб.
Часть текста: veía que reinaba una especie de frialdad entre el hermano y la hermana, pero no era cuestión de falta de cáriño, antes bien de celos. Voy a explicarme, puesto que viene a cuento, en dos palabras. La pobre Lisa, después del arresto del príncipe, estaba como poseída de yo no sé qué orgullo arrogante, qué altivez inaccesible, casi insoportable; pero todo el mundo en la casa adivinó la verdad, a saber, que ella sufría, y, en cuanto a mí, si al principio me irritaba y fruncía las cejas ante aquellos modales, fue únicamente a causa de mi susceptibilidad mezquina, decuplicada aún por la enfermedad; por lo menos eso es lo que pienso hoy de ello. Pero jamás dejé de querer a Lisa. Muy al contrario, la quería todavía más. Solamente que no quería ser yo quien diera el primer paso, aun comprendiendo que tampoco sería ella quien to daría, a ningún precio. Desde que se conoció la historia del príncipe, inmediatamente después de su ...
6. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo IX
Входимость: 12. Размер: 54кб.
Часть текста: me había hecho un gran honor al dirigirse a mí como a su único amigo en un momento semejante, y jamás yo podría olvidar aquello. Por el contrario, su confesión era "conmovedora", aunque él tuviera que burlarse de ese calificativo, y si a veces contenía elementos cínicos o incluso un poco ridículos, yo era lo bastante ancho de miras para comprender o admitir el realismo, sin, por otra parte, manchar el ideal. Sobre todo, yo había comprendido por fin a aquel hombre y estaba un poco molesto y despechado por el hecho de que hubiera sido una cosa tan sencilla: a aquel hombre yo lo había instalado siempre en mi corazón, a una altura extrema, en las nubes; me era preciso absolutamente revestir su destino de misterio, y deseaba, como es natural, que ese misterio no se descubriese de una manera tan fácil. Por otra parte, en su encuentro con ella y en sus dos años de sufrimiento, había también bastantes cosas complicadas: "él no había querido la fatalidad; el tenía necesidad de libertad, y no de la servidumbre del destino; era esa servidumbre del destino lo que lo había obligado a ofender a mamá, que lo esperaba en Koenigsberg... Además, ese hombre, en todo caso, era para mí un predicador: llevaba en su corazón la edad de oro y conocía el porvenir del ateísmo. Pues bien, su encuentro con ella lo había roto todo, todo lo había deformado! Oh!, desde luego, yo no la traicioné, pero sin embargo tomé partido por él. Mamá, por ejemplo, razonaba yo, no habría turbado nada en su destino, ni siquiera casándose con él. Yo to comprendía; era completamente diferente de su encuentro con la otra....
7. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Tercera parte. Capitulo V
Входимость: 12. Размер: 56кб.
Часть текста: era y cómo se llamaba. Pero apenas se había mantenido serio mientras murmuraba algunas palabras, sus ojos miraron casualmente a Rasumikhine. Entonces ya no pudo contenerse y lanzó una carcajada que, por efecto de la anterior represión, resultó más estrepitosa que las precedentes. El extraordinario furor que esta risa loca despertó en Rasumikhine prestó, sin que éste lo advirtiera, un buen servicio a Raskolnikof. -Demonio de hombre! -gruñó Rasumikhine, con un ademán tan violento que dio un involuntario manotazo a un velador sobre el que había un vaso de té vacío. Por efecto del golpe, todo rodó por el suelo ruidosamente. -No hay que romper los muebles, señores míos -exclamó Porfirio Petrovitch alegremente-. Esto es un perjuicio para el Estado. Raskolnikof seguía riendo, y de tal modo, que se olvidó de que su mano estaba en la de Porfirio Petrovitch. Sin embargo, consciente de que todo tiene su medida, aprovechó un momento propicio para recobrar la ...
8. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo V
Входимость: 11. Размер: 59кб.
Часть текста: con un interés caluroso, sin decir palabra. -Me mandó usted a Daria Onissimovna - empecé a quemarropa, un poco molesto además por aquel interés demasiado manifiesto que, por otra parte, resultaba agradable. Ella tomó de pronto la palabra, sin contestar a mi pregunta: -Me lo han contado, lo sé todo. Aquella noche terrible... Cuánto debió usted de sufrir! Es verdad, puede ser verdad que lo encontraron a usted sin conocimiento, expuesto a la helada? -Es que a usted... Lambert...? - farfullé ruborizándome. --Me lo contó todo en aquellos momentos; pero yo lo aguardaba a usted: Vino a mi casa espantado. En casa de usted... donde estaba usted en la cama, enfermo, no quisieron dejarlo pasar... lo recibieron de una manera extraña... No sé verdaderamente cómo sucedió aquello, pero él me ha hablado mucho de esa noche; me dijo que al abrir usted los ojos me nombró en seguida... que habló del afecto que me tiene. Me conmoví hasta las lágrimas, Arcadio Makarovitch, e ignoro incluso por qué he merecido tanta simpatía de su parte, sobre todo en el estado en que usted se hallaba. Dígame, el señor Lambert es sú camarada de infancia? -Sí, solamente que en este caso... confieso que he sido imprudente, tal vez le he dicho demasiado. -Oh! Aun sin él, yo habría sabido ver esa negra y terrible intriga! Yo siempre presentí que lo...
9. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Segunda parte. Capítulo III
Входимость: 11. Размер: 39кб.
Часть текста: inspiraba horror y todo el mundo le había dejado. De vez en cuando, alguien se atrevía a entreabrir la puerta y le miraba y le amenazaba. Estaba rodeado de enemigos que le despreciaban y se mofaban de él. Reconocía a Nastasia y veía a otra persona a la que estaba seguro de conocer, pero que no recordaba quién era, lo que le llenaba de angustia hasta el punto de hacerle llorar. A veces le parecía estar postrado desde hacía un mes; otras, creía que sólo llevaba enfermo un día. Pero el... suceso lo había olvidado completamente. Sin embargo, se decía a cada momento que había olvidado algo muy importante que debería recordar, y se atormentaba haciendo desesperados esfuerzos de memoria. Pasaba de los arrebatos de cólera a los de terror. Se incorporaba en su lecho y trataba de huir, pero siempre había alguien cerca que le sujetaba vigorosamente. Entonces él caía nuevamente en el diván, agotado, inconsciente. Al fin volvió en sí. Eran las diez de la mañana. El sol, como siempre que hacía buen tiempo, entraba a aquella hora en la habitación, trazaba una larga franja luminosa en la pared de la derecha e iluminaba el rincón inmediato a la puerta. Nastasia estaba a su cabecera. Cerca de ella había un individuo al que Raskolnikof no...
10. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capitulo XI
Входимость: 11. Размер: 52кб.
Часть текста: más cuanto que no estoy seguro... Me colé en casa de Lambert, naturalmente, fuera de mí. Incluso me daba miedo de él y de Alphonsine. He observado siempre que los franceses, incluso los más desatinados, los más libertinos, se muestran extraordinariamente apegados, en su interior, a un cierto orden burgués, a un cierto plan de vida, terriblemente prosaico, rutinario y ritual, adoptado de una vez para siempre. Por lo demás, Lambert comprendió muy pronto que había sucedido algo y se mostró encantadó al ver que me tenía por fin en su casa. No soñaba más que con eso, día y noche, todos aquellos días! Qué necesario le era yo! Y ahora que había perdido toda esperanza, me presentaba de repente, por mis propios pasos, y además poseído de una locura tan enorme, exactamente en el estado que a él le hacía falta. -Lambert, vino! - grité -. Dame de beber! Déjame formar escándalo! Alphonsine!, dónde tiene usted su guitarra? No describo la escena, es superfluo. Bebimos, y se lo conté todo, todo. Él escuchaba ávidamente. Fui yo quien le propuso...