Поиск по творчеству и критике
Cлово "RUEGO"


А Б В Г Д Е Ж З И Й К Л М Н О П Р С Т У Ф Х Ц Ч Ш Щ Э Ю Я
0-9 A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z
Поиск  
1. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Cuarta parte. Capítulo I
Входимость: 5. Размер: 36кб.
2. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Quinta parte. Capitulo III
Входимость: 5. Размер: 42кб.
3. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo II
Входимость: 5. Размер: 44кб.
4. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Tercera parte. Libro IX. La instrucción preparatoria. Capítulo IV. Segunda tribulación
Входимость: 4. Размер: 17кб.
5. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo VI
Входимость: 4. Размер: 42кб.
6. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capitulo VII
Входимость: 4. Размер: 41кб.
7. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Cuarta parte. Capitulo V
Входимость: 4. Размер: 55кб.
8. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo XII
Входимость: 4. Размер: 45кб.
9. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo VI
Входимость: 3. Размер: 70кб.
10. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo VIII
Входимость: 3. Размер: 58кб.
11. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Tercera parte. Capitulo V
Входимость: 3. Размер: 56кб.
12. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Sexta parte. Capitulo VII
Входимость: 3. Размер: 25кб.
13. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Tercera parte. Capitulo III
Входимость: 3. Размер: 37кб.
14. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Tercera parte. Capitulo II
Входимость: 3. Размер: 33кб.
15. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Tercera parte. Capitulo IV
Входимость: 3. Размер: 34кб.
16. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo II
Входимость: 3. Размер: 61кб.
17. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Segunda parte. Capítulo VII
Входимость: 2. Размер: 53кб.
18. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Tercera parte. Libro IX. La instrucción preparatoria. Capitulo VII. El gran secreto de Mitia
Входимость: 2. Размер: 27кб.
19. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo X
Входимость: 2. Размер: 57кб.
20. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Primera parte. Libro II. Una reunión fuera de lugar. Capítulo II. Un viejo payaso
Входимость: 2. Размер: 25кб.
21. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Tercera parte. Libro VIII. Mitia. Capitulo VIII. Delirio
Входимость: 2. Размер: 32кб.
22. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Primera parte. Libro III. Los sensuales. Capítulo XI. Otra honra perdida
Входимость: 2. Размер: 20кб.
23. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Quinta parte. Capitulo I
Входимость: 2. Размер: 49кб.
24. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Cuarta parte. Libro XI. Iván Fiodorovitch. Capitulo II. El pie hinchado
Входимость: 2. Размер: 27кб.
25. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Primera parte. Capitulo III
Входимость: 2. Размер: 37кб.
26. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capitulo XI
Входимость: 2. Размер: 52кб.
27. Dostoevsky. El jugador (Spanish. Игрок). Capítulo 11
Входимость: 2. Размер: 23кб.
28. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo V
Входимость: 2. Размер: 59кб.
29. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Epílogo. Capítulo primero. Planes de evasión
Входимость: 2. Размер: 14кб.
30. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Tercera parte. Libro VIII. Mitia. Capitulo VII. El de antaño
Входимость: 2. Размер: 40кб.
31. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Sexta parte. Capitulo VIII
Входимость: 1. Размер: 30кб.
32. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Cuarta parte. Capitulo VI
Входимость: 1. Размер: 22кб.
33. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Primera parte. Libro III. Los sensuales. Capítulo V. Confesión de un corazón ardiente. La cabeza baja
Входимость: 1. Размер: 21кб.
34. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Cuarta parte. Capitulo II
Входимость: 1. Размер: 34кб.
35. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Cuarta parte. Libro X. Los muchachos. Capítulo III. El colegial
Входимость: 1. Размер: 20кб.
36. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo primero
Входимость: 1. Размер: 48кб.
37. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Cuarta parte. Libro XII. Un error judicial. capítulo XII. No hubo asesinato
Входимость: 1. Размер: 22кб.
38. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Quinta parte. Capitulo IV
Входимость: 1. Размер: 47кб.
39. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo V
Входимость: 1. Размер: 52кб.
40. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Sexta parte. Capitulo III
Входимость: 1. Размер: 26кб.
41. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Tercera parte. Libro VII. Aliocha. Capitulo II. El momento decisivo
Входимость: 1. Размер: 15кб.
42. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Epílogo. Capitulo II. Mentiras sinceras
Входимость: 1. Размер: 20кб.
43. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Primera parte. Capitulo II
Входимость: 1. Размер: 49кб.
44. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Cuarta parte. Libro XI. Iván Fiodorovitch. Capítulo IV. El himno y el secreto
Входимость: 1. Размер: 35кб.
45. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Primera parte. Libro II. Una reunión fuera de lugar. Capítulo VII. Un seminarista ambicioso
Входимость: 1. Размер: 23кб.
46. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Segunda parte. Libro V. Pro y contra. Capítulo II. Smerdiakov y su guitarra
Входимость: 1. Размер: 15кб.
47. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo VII
Входимость: 1. Размер: 56кб.
48. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Segunda parte. Libro V. Pro y contra. Capitulo V. "El gran inquisidor"
Входимость: 1. Размер: 55кб.
49. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Segunda parte. Capítulo III
Входимость: 1. Размер: 39кб.
50. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Tercera parte. Libro IX. La instrucción preparatoria. Capítulo VIII. Declaran los testigos. El "pequeñuelo"
Входимость: 1. Размер: 24кб.

Примерный текст на первых найденных страницах

1. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Cuarta parte. Capítulo I
Входимость: 5. Размер: 36кб.
Часть текста: contra mí. En cambio, contando con la ayuda de usted, yo creo... -No espere que le ayude -le interrumpió Raskolnikof. -Permítame una pregunta. Hasta ayer no llegaron su madre y su hermana, verdad? Raskolnikof no contestó. -Sí, sé que llegaron ayer. Y yo llegué anteayer. Pues bien, he aquí lo que quiero decirle, Rodion Romanovitch. Creo innecesario justificarme, pero permítame otra pregunta: qué hay de criminal en mi conducta, siempre, claro es, que se miren las cosas imparcialmente y sin prejuicios? Usted me dirá que he perseguido en mi propia casa a una muchacha indefensa y que la he insultado con mis proposiciones deshonestas (ya ve usted que yo mismo me adelanto a enfrentarme con la acusación), pero considere usted que soy un hombre et nihil humanum... En una palabra, que soy susceptible de caer en una tentación, de enamorarme, pues esto no depende de nuestra voluntad. Admitido esto, todo se explica del modo más natural. La cuestión puede plantearse así: soy un monstruo o una víctima? Yo creo que soy una víctima, pues cuando proponía al objeto de mi pasión que huyera conmigo a América o a Suiza alimentaba los sentimientos más respetuosos y sólo pensaba en asegurar nuestra felicidad común. La razón es esclava de la pasión, y era yo el primer perjudicado por ella... -No se trata de eso -replicó Raskolnikof con un gesto de disgusto-. ...
2. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Quinta parte. Capitulo III
Входимость: 5. Размер: 42кб.
Часть текста: Deseo hablar inmediatamente con su hijastra Sonia Simonovna. Se llama así, no es cierto? Permítame... Y Piotr Petrovitch, pasando por el lado de Catalina Ivanovna, se dirigió al extremo opuesto de la habitación, donde estaba Sonia. Catalina Ivanovna quedó clavada en el sitio, como fulminada. No comprendía por qué Piotr Petrovitch negaba que había sido huésped de su padre. Esta hospitalidad creada por su fantasía había llegado a ser para ella un artículo de fe. Por otra parte, le sorprendía el tono seco, altivo y casi desdeñoso con que le había hablado Lujine. Ante la aparición de Piotr Petrovitch se había ido restableciendo el silencio poco a poco. Aun dejando aparte que la gravedad y la corrección de aquel hombre de negocios contrastaba con el aspecto desaliñado de los inquilinos de la señora Lipevechsel, todos ellos comprendían que sólo un motivo de excepcional importancia podía justificar la presencia de Lujine en aquel lugar y, en consecuencia, esperaban un golpe teatral. Raskolnikof, que estaba al lado de Sonia, se apartó para dejar el paso libre a Piotr Petrovitch, el cual, al parecer, no advirtió su presencia. Transcurrido un instante, apareció Lebeziatnikof, pero no entró en la habitación, sino que se quedó en el umbral. En su semblante se mezclaban la curiosidad y la sorpresa, y prestó atención a lo que allí se decía, ...
3. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo II
Входимость: 5. Размер: 44кб.
Часть текста: propia iniciativa; Versilov no había pronunciado la menor palabra ni aventurado la más mínima alusión; el príncipe mismo fue quien dio los primeros pasos, y Versilov admitió la cosa en silencio y no volvió a mencionarla nunca; jamás mostró acordarse en forma alguna de la promesa. Diré de paso quc el príncipe, al principio, se mostró totalmente encantado con él, en particular con sus discursos; llegó incluso a entusiasmarse y me lo dijo en varias ocasiones. Exclamaba a veces, a solas conmigo y casi con desesperación, que era "tan inculto, que llevaba un camino tan equivocado...". La verdad es queéramos entonces tan amigos... ! Por mi parte me esforzaba en hacer que Versilov adquiriera una buena opinión del príncipe, defendía sus defectos, aunque los veía muy bien; pero Versilov se quedaba silencioso o sonreía. -Si tiene defectos, para mí por lo menos tiene tantas cualidades como defectos! - exclamé un día, plantándole cara a Versilov. -Cómo lo adulas, gran Dios! - se burló. -En qué? - pregunté sin comprender. -Tantas cualidades!Pues hará milagros, si tiene tantas cualidades como defectos! Por lo visto, no se trataba solamente de una opinión. En una palabra, evitaba entonces hablar del príncipe, como en general evitaba hablar de todos los problemas esenciales; pero del príncipe todavía más. Yo sospechaba ya que iba a ver al príncipe cuando yo no estaba y que sostenía con él relaciones particulares, pero aquello no me molestaba. Tampoco me sentía celoso porque le hablase más...
4. Dostoevsky. Los hermanos Karamazov (Spanish. Братья Карамазовы). Tercera parte. Libro IX. La instrucción preparatoria. Capítulo IV. Segunda tribulación
Входимость: 4. Размер: 17кб.
Часть текста: cuanto nos sea posible. Ya ha visto usted cómo llevamos este asunto. Está usted de acuerdo, Hipólito Kirillovitch? -Desde luego -aprobó el procurador, aunque en un tono un tanto seco. Hay que advertir que Nicolás Parthenovitch, desde su reciente entrada en funciones, miraba al procurador con simpatía y respeto. Era casi el único que creía ciegamente en el talento psicológico y oratorio de Hipólito Kirillovitch, del que había oído hablar en Petersburgo. En compensación, el joven Nicolás Parthenovitch era el único hombre en el mundo que contaba con el afecto sincero de nuestro infortunado procurador. Por el camino se habían puesto de acuerdo acerca del asunto en que iban a intervenir, y, durante el interrogatorio, la aguda percepción del juez cazaba al vuelo cualquier señal o gesto, por insignificantes que fuesen, de su colega. -Señores -dijo Mitia-, permítanme referir las cosas sin interrumpirme con trivialidades. Les aseguro que seré breve. -De acuerdo. Pero antes de escuchar su relato, le ruego que explique un detalle sumamente interesante para nosotros. Ayer por la tarde, a las cinco, usted tomó en préstamo diez rublos de su amigo Piotr Ilitch Perkhotine, dejando en prenda dos pistolas. -Cierto, señores; empeñé mis pistolas por diez rublos al regresar de mi viaje. Qué más? -Al regresar de su viaje? De modo que había salido usted de la ciudad? -Sí. Fue un viaje de cuarenta verstas, señores. No lo sabían? El procurador y el juez cambiaron una mirada. -Convendría que nos relatara usted metódicamente todo cuanto hizo ayer desde que empezó la jornada. Por ejemplo, quiere usted decirnos por qué se marchó, y a qué hora, y ...
5. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo VI
Входимость: 4. Размер: 42кб.
Часть текста: me apreuraba a volver a casa. Hace falta ir allí inmediatamente. Lo más probable será que me la encuentre sola; sola o con alguien, poco importa: se la puede llamar. Me recibirá; se quedará asombrada, pero me recibirá. Si no me recibe, insistiré para que lo haga, le mandaré decir que es absolutamente necesario. Creerá que se trata del documento, y me recibirá. Y me enteraré de todo con respecto a Tatiana. A continuación... pues bien, a continuación, qué? Si soy yo el que estoy equivocado, presentaré mis excusas; si tengo razón y es ella la que se ha portado mal, entonces será el fin de todo. Qué es lo que voy a perder? Nada. Vamos allá, vamos allá! " Ahora bien, no lo olvidaré nunca, y me acordaré de eso con orgullo,no fui de ninguna rnanera! Nadie lo sabrá, esto quedará ignorado, pero me basta con saberlo yo, con saber que en aquel momento he sido capaz de una reacción de infinita nobleza. "Es una tentación, y la...
6. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capitulo VII
Входимость: 4. Размер: 41кб.
Часть текста: divertidas y graciosas, y no me enfadaban lo más mínimo. Aquello era sin duda porque, a pesar de todo, yo había roto mis cadenas y por primera vez me sentía en libertad. Sentía también que había estropeado mis asuntos: cómo obrar ahora con respecto a la carta sobre la herencia? La cuestión se tornaba aún más tenebrosa. Seguramente iban a creer que yo quería vengarme de Versilov. Pero mientras estábamos en el salón, durante todos aquellos debates, yo había resuelto someter la cuestión a un arbitraje y elegir como árbitro a Vassine o, si no era posible, a algún otro, y ya sabía a quién. Un día, exclusivamente para eso y por única vez, iría yo a casa de Vassine, pensaba; seguidamente desapareceré para todo el mundo y por mucho tiempo, para varios meses, desapareceré incluso y sobre todo para Vassine; veré si acaso solamente, de cuando en cuando, a mi madre y a mi hermana. Todo aquello era algo muy desordenado; yo me daba cuenta de que alguna cosa estaba ya hecha, pero no como habría sido preciso, y... estaba contento; lo repito, a pesar de todo, me sentía dichoso. Entonces decidí acostarme más temprano, previendo una larga caminata para el día siguiente. Además de buscar un alojamiento y trasladar mis cosas, tendría que tomar ciertas decisiones que resolví ejecutar de una forma a otra. Pero la jornada no debía acabarse sin imprevistos y Versilov consiguió sorprenderme de una manera asombrosa. Él no venía nunca, absolutamente nunca, a mi buhardilla. Ahora bien, todavía no llevaba yo una hora en mi cuarto cuando oí sus pasos en la escalera: me...
7. Dostoevsky. Crimen y castigo (Spanish. Преступление и наказание). Cuarta parte. Capitulo V
Входимость: 4. Размер: 55кб.
Часть текста: le prestaban la menor atención. En la sala contigua trabajaban varios escribientes, y saltaba a la vista que ninguno de ellos tenía la menor idea de quién era Raskolnikof. El visitante paseó por toda la estancia una mirada retadora, preguntándose si habría allí algún esbirro, algún espía encargado de vigilarle para impedir su fuga. Pero no había nada de esto. Sólo veía caras de funcionarios que reflejaban cuidados mezquinos, y rostros de otras personas que, como los funcionarios, no se interesaban lo más mínimo por él. Se podría haber marchado al fin del mundo sin llamar la atención de nadie. Poco a poco se iba convenciendo de que si aquel misterioso personaje, aquel fantasma que parecía haber surgido de la tierra y al que había visto el día anterior, lo hubiera sabido todo, lo hubiera visto todo, él, Raskolnikof, no habría podido permanecer tan tranquilamente en aquella sala de espera. Y ni habrían esperado hasta las once para verle, ni le habrían permitido ir por su propia voluntad. Por lo tanto, aquel hombre no había dicho nada..., porque tal vez no sabía nada, ni nada había visto (cómo lo habría podido ver?), y todo lo ocurrido el día anterior no había sido sino un espejismo agrandado por su mente enferma. Esta explicación, que le parecía cada vez más lógica, ya se le había ocurrido el día anterior en el momento en que sus inquietudes, aquellas inquietudes ...
8. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Tercera parte. Capítulo XII
Входимость: 4. Размер: 45кб.
Часть текста: Silenciosa a inmóvil, derecha como un poste, estaba sentada en su silla, apretados los labios, sin quítarme los ojos de encima, escuchándome con toda atención. Pero cuando acabé, de pronto dio un salto, tan precipitadamente, que también yo brinqué. -Ah, bribón.! Entonces, esa carta la llevabas verdaderamenté cosida encima, y fue la imbécil de María Ivanovna quien te la cosió! Ah, canalla, sinvergüenza! Entonces, para eso venías aquí, para domar los corazones, para conquistar el gran mundo, para vengarte, no importa contra quién, por ser un bastardo! -Tatiana Pavlovna - exclamé -, le prohibo que me injurie! Quizás ha sido usted, con sus injurias, desde el principio, la causa del encarnizamiento que he mostrado aquí. Sí, soy bastado y acaso haya querido en efecto vengarme de ser un bastardo, y quizás en efecto me he querido vengar en no importa quién, puesto que ni el mismo diablo podría descubrir al culpable; pero acuérdese usted de que he repudiado mi alianza con los pillos y he vencido mis pasiones. Soltaré sin decir nada el documento delante de ella y me iré, sin esperar siquiera a que me diga una palabra; usted será testigo. -Dame esa carta, dámela inmediatamente, ponla aquí en la mesa! Quién sabe si estás mintiendo? -La llevo cosida al bolsillo; fue María Ivanovna en persona quien me la cosió; y aquí, cuando me hicieron un redinjote nuevo, la saqué del vicio y la cosí yo mismo en éste; aquí está, mire, palpe, no miento. -Pues bien, dámela, sácala! - se emperraba Tatiana Pavlovna. -Por nada en el mundo, se lo repito. La depositaré delante de ella en presencia de...
9. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Primera parte. Capítulo VI
Входимость: 3. Размер: 70кб.
Часть текста: basta una mota de polvo o un cabello para disipar mi buen humor y reemplazarlo por el malo. Y por desgracia mis malas impresiones son menos rápidas en dispersarse, aunque yo no sea rencoroso. Cuando entré, me di cuenta de que mi madre acababa de interrumpir en aquel instante y a toda prisa el hilo de su conversación, por lo visto muy animada, con Tatiana Pavlovna. Mi hermana había vuelto del trabajo apenas un minuto antes que yo y aún no había salido de su habitación. Aquel partido se componía de tres habitaciones: aquella en la que todo el mundo se reunía según la costumbre, la habitación del medio o salón, era bastante espaciosa y hasta conveniente. Se veían allí divanes rojos y blandos, por lo demás pasablemente usados (Versilov no soportaba las fundas), algunos tapices, varias mesas veladores inútiles. Seguidamente, a la derecha, se abría el cuarto de Versilov, estrecho y exiguo, con una sola ventana; había allí una miserable mesa de escritorio sobre la que se arrastraban varios libros abandonados y papeles olvidados, y delante de la mesa un no menos lastimoso sillón blando, cuyos muelles rotos apuntaban al aire, lo que con frecuencia hacía gemir y jurar a Versilov. En aquel mismo gabinete era donde se le preparaba la cama en un diván blando a igualmente usado; él detestaba aquel gabinete y, según creo, no se servía jamás de él, prefiriendo quedarse sin hacer nada en el salón durante horas enteras. A la izquierda del salón se encontraba un cuartito exactamente idéntico, donde dormían mi madre y mi hermana. Se tenía acceso al salón por un pasillo que terminaba en la cocina, donde se alojaba la cocinera Lukeria (42). Cuando ella estaba en funciones, un olor a grasa...
10. Dostoevsky. El adolecente (Spanish. Подросток). Segunda parte. Capítulo VIII
Входимость: 3. Размер: 58кб.
Часть текста: con el juego, con el oro, con los arreglos de cuentas. Calculaba, como frente a una mesa de juego, las posturas y las oportunidades, y durante toda la noche aquello fue como una especie de pesadilla abrumadora. Diré la verdad: en todo el día anterior, a pesar de mis impresiones extraordinarias, no podía menos que acordarme una y otra vez de mis ganancias en casa de Zerchtchikov. Expulsaba la idea, pero no podía rechazar la impresión, y me estremecía a cada recuerdo. Aquella ganancia me había mordido en el corazón. Habría -nacido yo jugador? Por lo menos, sí era probable que tuviese las cualidades ser jugador. Incluso hoy día, al escribir estas líneas, me gusta a veces pensar en el juego. Me sucede en ocasiones pasarme horas enteras, en silencio, haciendo cálculos de juego y viéndome en sueños apostando y ganando (101). Sí, tengo "cualidades" muy diversas, y mi alma no está tranquila. Tenía el proyecto de ir a las diez a casa de Stebelkov, a pie. Despedí a Matvei en cuanto se presentó. Mientras me bebía mi café, trataba de examinar las cosas. Estaba contento; al entrar por un instante en mí mismo, adiviné que estaba contento sobre todo porque...